El Departamento de Policía Bolívar sigue afianzando su compromiso de garantizar la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, y así prevenir la materialización de las diversas causas de riesgo de vulneración a que se ven expuestos. Al mismo tiempo se ejecutan acciones para capturar a quienes atentan contra la integridad, libertad y formación sexual de ellos.
Justamente, personal adscrito a la Unidad Básica de Investigación Criminal de la Seccional de Protección y Servicios Especiales del Departamento de Policía Bolívar, en coordinación con la fiscalía general de la Nación, capturó en el barrio Centro del municipio de Magangué, a un hombre mediante orden judicial por el presunto delito de acceso carnal violento agravado en concurso homogéneo sucesivo con menor de 14 años.
La investigación se inició el 5 de enero del presente año en el corregimiento Regencia, jurisdicción del municipio de Montecristo, a partir de la denuncia instaurada por un tío de la menor ante la Comisaría de Familia. El suceso fue puesto en conocimiento de los investigadores de la Seccional de Protección y Servicios Especiales.
Una vez se conoció el caso, se activó la ruta de atención de acuerdo a la información recolectada por parte de los investigadores. El presunto agresor sexual, quien fue identificado como Dagoberto Antonio Monterrosa, de 48 años, conocido con el alias de “El Brujo”, y padre de la víctima. Este aprovechaba la familiaridad con la niña de 13 años, y en horas de la noche, cuando, al parecer, llegaba bajo los efectos del alcohol a su vivienda, accedía sexualmente contra ella.
En las audiencias preliminares le fue imputado el delito de acceso carnal violento agravado en concurso homogéneo sucesivo con menor de 14 años. El presunto agresor sexual, un juez de la República le dictó medida de aseguramiento en centro carcelario.
Al respecto, el coronel José Abdón Galindo Sánchez, comandante Departamento de Policía Bolívar, aseveró, que “rechazamos estos intolerables actos sexuales en contra de los niños, niñas y adolescentes, y hago un llamado a los padres de familia o cualquier otro ser querido, a que escuchen a sus niños y estén muy pendientes a sus comportamientos, para evitar que se repitan este tipo de casos”.
La Institución invita a denunciar estos aberrantes casos marcando a la línea 123 o al 141 del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, para poder actuar.
